Mucho sol puede molestar, pero poca luz deprime. Lo cierto es que encontrar el equilibrio perfecto cuesta, pero si es posible gracias a las tecnologías y ofertas que hoy existen en el mercado. Y en una fecha en que la renovación es una constante, gracias a la energía primaveral, te mostramos cómo poder conseguir lo que buscas, para mejorar las emociones, gracias a el hogar que buscas.
La luz natural en una vivienda es tan o más importante que otros elementos como su ubicación, el tamaño o la distribución. Este factor puede ser un condicionante para muchas cosas que realizamos en el día a día y ni siquiera nos damos cuenta.
Si has vivido alguna vez en una casa sin demasiada luz natural, te habrás dado cuenta que, esto repercute directamente en tu estado de ánimo, e incluso en la regulación del organismo, junto con ayudarnos además a ahorrar en el consumo eléctrico.
“Está científicamente probado que la falta de luz natural puede ser causante de la fatiga injustificada, depresión o apatía. Por eso, en algunos países del norte de Europa, por ejemplo, donde pasan meses sin ver la luz de sol, sufren altas tasas de depresión”, señala la Jefa de Proyecto de la Constructora Artem, María Constanza Ávila.
Artem reúne a un equipo de profesionales, que, después de analizar la oferta existente en el mercado se dieron cuenta que la búsqueda de la estética había dejado de ser lo más importante, privilegiándose en la mayoría de los casos, criterios esencialmente económicos. Y entre ellos, dejaron de lado, lo más importante, que es la estética y dentro de ésta, el ingreso de la luz a un hogar.
Para lograr espacios luminosos con grandes ventanales, se necesita salvar luces de mayor longitud, esto se logra por medio de reforzar la estructura de la vivienda, lo que a su vez conlleva un mayor gasto. Es por esta razón que la oferta actual, privilegiando los criterios económicos por sobre la conformación de un hogar idílico, tiene como resultado final muros con pequeñas ventanas que dejan entrar muy poca luz natural.
“Si bien es cierto que la actual oferta cumplía con el rol practico de vivienda familiar, fallaban en un aspecto que para nosotros es fundamental. La vivienda es más que un volumen funcional. Es por eso que, cuando realizamos los proyectos, hacemos un estudio del comportamiento lumínico (de la luz solar de la casa) y se diseña de tal manera, para que, por ejemplo, no llegue nunca el sol directo a las habitaciones de la casa y llegué en cambio, la luz, de la forma en que la persona lo pida”, explica la profesional.
A esto, además, se suma el tomar la tecnología existente a nuestro favor y para eso es posible instalar persianas motorizadas, que se utilizan para cubrir la luz, si en algún momento es necesario.
“Es fundamental que la casa reciba abundante luz natural y que se encuentre ventilada todos los días, de lo contrario, el ambiente podría afectar nuestro estado de ánimo. Existe una gran diferencia entre estar en un sitio lúgubre o uno con abundante luz, una buena elección en diseño y emplazamiento, puede repercutir directamente en la salud de las personas que viven en la casa y convertirlo definitivamente en un hogar”, agrega María Constanza Ávila.
Constructora Artem realiza proyectos que destacan principalmente por su estética y la convivencia constante con la luz natural.
Más información en http://www.constructoraartem.cl
0 comentarios